viernes, 21 de mayo de 2010

Cartagena !!











Una pequeña muestras de fotos, que refleja la belleza de Cartagena de indias, DISFRUTENLA.

Memorias de una primipara

Debo admitir que al comienzo estaba muy asustada, no sabía si esta carrera era la mejor opción para mí, por lo que en mi cabeza me cuestionaba si había hecho una buena elección y tenía miedo de ser un fraude y decepcionar a las personas que me rodeaban, en especial a mis padres que ponían toda su confianza y mi fuerza en mí para que comenzara mi camino para ser una profesional.
Todo comenzó el día de la inducción, primer día en la "U", en donde iba a conocer mis compañeros de carrera, por tal razón una fiesta de mariposas hacía estragos en mi estómago, no sabía con que me podría encontrar, ellos me acompañarían durante 9 semestres, 4 años y medio de mi vida.
Por ser una persona tan sociable, ya conocía a una niña, la cual hizo el examen de inglés conmigo unos meses antes de este día, por lo que me llamó y nos encontramos a la entrada de la "U" ese día; duramos juntas todo el día, a pesar de que al comienzo estaba muy emocionada, el tiempo, los comentarios y las cosas que hacían los "facilitadores" no me convencían, y aunque en mi rostro reflejara una sonrisa, mi pecho se oprimía y una lágrima se preparaba para brotar; ahora que lo pienso bien, mis "facilitadores" no hicieron un muy buen trabajo que digamos o por lo menos no lograron ese efecto en mí.
Para tomar el bus debo caminar aproximadamente 7 cuadras, parece mucho, lo sé, pero la verdad no me molesta, es buen ejercicio y en el camino pienso, despejo muchas dudas y me desahogo; eso fue lo que hice los primeros días de clases: mis compañeros no me convencían, sentía que debía estudiar otra cosa y más de una vez, mis lágrimas brotaron de mis ojos, reluciendo mis sentimientos. Más de una vez quise tirar la toalla, decir no voy más; todos parecían disfrutar lo que hacían menos yo y eso no me agradaba para nada.
No se como pasó, pero el tiempo cambió mis pensamientos y mis acciones, creo que al inicio estaba bloqueada por una pared de prejuicios que me decían que esta carrera era para vagos, pantalleros, y yo misma me buscaba mis limitaciones nadie más.
Ahora mismo me considero una persona afortunada, porque no solo acabo de culminar mi primer semestres universitario, si no que he conocido a muchas personas, que me ayudarán en el camino, así como me ayudaron durante todo este primer semestre y que me acompañaran en el viaje a convertirme en una profesional, porque esa es mi meta y no dejaré que nadie me vuelva a manipular, porque yo sola soy la que construye mi camino, nadie más.
No se trata del final, se trata del viaje; espero disfrutar mi viaje al máximo, de ese modo no me arrepentiré nunca de mis acciones.

El final de un comienzo.

"¡¡YA QUIERO QUE SE ACABE EL COLEGIO!!"
Es lo que todos deseamos cuando estamos en el colegio, sentados en una silla muy incómoda, donde un profesor amargado nos esta dictando una clase sobre algún tema de "interés general", al cual no le prestamos atención ya que no vamos a estudiar nada relacionado con él, solo esperamos que se acabe ese parloteo, para empezar a estudiar lo que en realidad queremos.
Probablemente el día de nuestro grado fue el más feliz de nuestras vidas, hasta ese momento por supuesto, porque saliamos de la carcél del encierro que para ese momento significaba el colegio para poder tener libertad y hacer todo lo que queramos,pero tambiém el más triste, porque abandonamos a nuestros amigos; una parte de nosotros se queda con ellos, una parte de nosotros se quedan dentro del colegio, que durante 11 años, quizás mas, quizás menos, fue nuestro segundo hogar, porque es cierto: aunque muchas veces peliamos con nuestros profesores, con nuestros compañeros, quisimos quemar el colegio y hasta ponerle una bomba, fue nuestro segundo hogar, en donde alrededor de 35 personas, crecimos juntas, lloramos, reímos, "mamamos gallo", hicimos complots contra los profesores y hasta bailamos, fuimos más que simple compañeros, fuimos amigos, fuimos hermanos.Pero como en toda hermandad, algunos se alejan para no volver, otros se pierden en el camino y ni llegan a reconocerse sí mismos, otros se encierran en su pequeña bola de plástico que los proteje del mundo exterior, mientras otros decidimos compartir nuestro nuevo viaje con nuestros compañeros y amigos.
Tristemente, o debería decir POR FORTUNA, es en este nuevo viaje en donde encontramos y descubrimos quienes son en realidad nuestros verdaderos amigos; con los que siempre hablabamos se van alejando hasta quedar siendo solo un feliz recuerdo, mientras aquellos con los que solo reiamos un rato, nos van demostrando cuanto nos aprecian y lo importante que somos para ellos.
Dicen que debemos dejar a un lado nuestro pasado para seguir con nuestro presente y llegar al futuro y estoy de acuerdo con eso; pero mi pasado, en el colegio, es algo que nunca olvidaré y las personas, tanto malas como maravillosas, seguirán en mis recuerdos, porque cada una de estas, hizo que aprendiera algo: desde saber decir chistes y pintar con vinilo, hasta hacer una bomba olorosa.
El tiempo pasa, los recuerdos quedan; tu presencia se devanece, pero lo que significas prevalece.