Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
1 Pedro 5:7
Cada uno de nosotros tiene personalidades, gustos, temperamentos, cualidades propias que nos hacen diferente a los demás: lo que para un amigo o colega puede ser una gran felicidad para nosotros puede ser un total martirio.
Son esas mismas diferencias las que nos llenan de cargas y ansias, no sabemos como comportarnos y sin saberlo aveces hacemos cosas que no son las mejores, disgustando a los que nos rodean y a nosotros mismos.
¿Alguna vez has estado disgustado por algo, pero no sabes qué? Muchas veces ese disgusto que sentimos, no proviene de otra persona, sino que son nuestras propias ansias las que nos llenan y en el peor de los casos nos ciegan por lo que nos descargamos delante de alguien que ni tiene la culpa.
Dios es el Padre que siempre soñamos, Él nos da los mejores consejos, su Palabra no cambia y hoy te dice con un gran amor que eches todas tus ansias sobre él, pues siempre nos está cuidando y no quiere que nada nos atormente, para no dañar nuestra relación con los que nos rodea, llenar de amargura nuestro corazón y perder nuestra comunión con ÉL.
ORACIÓN: Gracias Señor porque limpias mi corazón, mi alma y todo lo que soy para presentarme como tu templo; siempre has tenido cuidado de nosotros y no hay amor más grande que ese. Te amo, te bendigo y hoy y siempre descargo más ansias ante Tí y me rindo con un corazón puro, lleno de adoración sólo para Tí. En el nombre de Jesús Amén.
Cada uno de nosotros tiene personalidades, gustos, temperamentos, cualidades propias que nos hacen diferente a los demás: lo que para un amigo o colega puede ser una gran felicidad para nosotros puede ser un total martirio.
Son esas mismas diferencias las que nos llenan de cargas y ansias, no sabemos como comportarnos y sin saberlo aveces hacemos cosas que no son las mejores, disgustando a los que nos rodean y a nosotros mismos.
¿Alguna vez has estado disgustado por algo, pero no sabes qué? Muchas veces ese disgusto que sentimos, no proviene de otra persona, sino que son nuestras propias ansias las que nos llenan y en el peor de los casos nos ciegan por lo que nos descargamos delante de alguien que ni tiene la culpa.
Dios es el Padre que siempre soñamos, Él nos da los mejores consejos, su Palabra no cambia y hoy te dice con un gran amor que eches todas tus ansias sobre él, pues siempre nos está cuidando y no quiere que nada nos atormente, para no dañar nuestra relación con los que nos rodea, llenar de amargura nuestro corazón y perder nuestra comunión con ÉL.
ORACIÓN: Gracias Señor porque limpias mi corazón, mi alma y todo lo que soy para presentarme como tu templo; siempre has tenido cuidado de nosotros y no hay amor más grande que ese. Te amo, te bendigo y hoy y siempre descargo más ansias ante Tí y me rindo con un corazón puro, lleno de adoración sólo para Tí. En el nombre de Jesús Amén.
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